Alguna vez regodeaste con tus labios,
la historia pasada de tus recorridos.
Yo escuchaba atenta para que el silencio
no me ganara en aquel juego…
Sin embargo, atentaste a tu destino,
lo que no se termina siempre vuelve…
Eso dijiste, así sucedió y de la nada
todo lo que teníamos, se derramó.Rebalso, murió.
"hoy ya me voy amor, y desearé que tengas un buen viaje..."
No hay comentarios:
Publicar un comentario