¿A dónde quedó mi hombre? ¿Dónde quedó aquel que despertaba cada una de mis pasiones hasta el máximo y me hacía desenvolverme como si nada en la vida importase más que eso? ¿En brazos de quién descansa ahora, si es que lo hace? ¿Piensa en mí? ¿Me recuerda? ¿Dónde está aquel hombre que hacía que mi médula se sintiera diminuta y temblara a cada segundo que nuestras pieles chocaban? ¿Dónde se perdió ese frenesí tan hermoso que sentía al invocar a los Dioses del amor? ¿Quién me arrancará con sus garras los párpados para despertarme de ésta horrible pesadilla? Al principio supe aceptar que te irías, supe entender que deseaba alejarte y comprendo que aún sigo pensando lo mismo pero ahora que no estás todo aquello que alguna vez te dí se convirtió en algo oscuro, en una fiera que desea arrasar con todo sin dejar absolutamente nada, en algo que se vuelve inútil al querer sentir, en una máquina insulsa de morbosidad, en un simple suspiro frágil que se vuelve más débil al inspirar. ¡BINGO! No logro estar contigo y tampoco sin tí. Corre por mis venas la necesidad de tu cuerpo, de tus manos, de tus ojos, de tu boca, de tu aliento, de todo lo que sos; y mi cabeza se anuda y de un martillazo se deja vencer por los sentimientos.
¿En dónde me encuentro parada? ¿Qué es todo este bullicio a mi alrededor? ¿Qué hacen estos enmascarados irrumpiendo en mi vida? Sí, tal vez sea injusta, tal vez sea egoísta, tal vez mi coraza lastime a todos aquellos que quieran quererme pero inevitablemente ésta droga me está carcomiendo cada espacio de mi cuerpo y déjandome fébril, ardida en cada centímetro del alma, anhelandolo a cada segundo, destruyéndome. En éste momento tan solo soy una araña, todo aquel que se enriede en mi tela morirá envenenado con TÚ veneno: aunque ya no estás esto sigue latente, el filo que le pusiste a mi corazón hoy me pone en pena y rompe absolutamente todo lo que decida obtenerme. Anonadada estoy. ¿Quién va a besarme como vos ahora? ¿Quién va a jugar conmigo? ¿Quién va a necesitar un empujón cuando el pasado lo arrastre? ¿Y por qué aún sigo queriendote dar ese empujón? Alguien que me explique de una máldita vez porqué te quiero de ésta forma, Alguien que me mate y se lleve bien lejos mi corazón, Alguien que me de el antídoto contra vos; porque si bien camino, todo en mi interior flaquea y se desmorona. Nada me importa ya, todos por los que alguna vez luché, hoy ya ni puedo mantener un simple pensamiento. ¿Por qué elegí quererte? ¿Por qué todo el mundo lo sabe? ¿Por qué todos mantienen al margén el "tema"? No voy a llorar, no voy a sufrir, no me interesa deprimirme, no me interesa demostrar vulnerabilidad frente a nadie y mucho menos lástima, cada quien puede tocar el tema que le interese, no voy a dejar que nadie se prive frente a un tema como éste. Estoy bien, orgullosa de lo que pasé, y no me arrepiento absolutamente de nada, entonces no entiendo como aún pueden seguir tratando de resguardarme frente a algo que me dió tanta félicidad. Estoy acá, parada frente a la cornisa, viendo todo y haciendo la "vista gorda", déjando en paz todos mis pensamientos y todo aquello que convive en mí para tan solo inspirar tu esencia y dejarte ir, una vez más.
ANTONELLA BIANCO.-♥
ANTONELLA BIANCO.-♥
{I will always love you.}
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